Alcaidía: «Para los concejales somos invisibles o no existimos»

El lunes pasado, mientras se desarrollaba una sesión del Concejo Deliberante en el Teatro Seminari, un grupo de manifestantes protestó frente al lugar contra el proyecto de construcción de una alcaidía en Belén de Escobar. «No fuimos atendidos, ni nos dejaron ingresar. Solo queremos conversar» afirmó uno de los vecinos presente.  Hasta el momento, aseguran, no han recibido ninguna respuesta a las notas entregadas en la Municipalidad y el Concejo Deliberante: «lo tienen todo encajonado». Otro hombre señaló que «esto va por mal camino, siguen tomándonos de idiotas, no responden a la gente». «Están buscando llevarnos al limite para justificar la agresión de la gente» agrega, «pero los ciudadanos no somos agresivos, somos gente de trabajo. En el fondo del cementerio no viven chorros ni gente  maleducada, los chicos van a la escuela». Otro vecino indignado por «la irrespetuosa forma en que se está llevando a cabo esto» considera que «para esta gente  nosotros somos invisibles o no existimos. No están haciendo lo que la voluntad del pueblo quiere.  Están haciendo lo que a ellos les da la regalada ganas. No fuimos recibidos, nadie va a levantar un teléfono y nadie te da una solución razonable». En tanto una mujer, preocupada ante el desolador panorama que abre la construcción de una alcaidía, dice no querer volver a su casa  «y no saber si el que está parado en la esquina es o no vecino del barrio». Y concluye: «No quiero no poder  ir a pasear un fin de semana por miedo a que usurpen mi propiedad, no por miedo  a los reclusos, sino por lo que vendrá con ello. ¿Quién responderá por nuestra seguridad y tranquilidad?»

Postura de los concejales opositores

Concejal Avejera: Que se construya donde no afecte el casco urbano de una ciudad y donde también se siga protegiendo el ambiente del lugar que elegimos para vivir.

Concejal Castagnaro:  Que se construya «lejos de los cascos urbanos».

Concejal Chmit: «No estoy de acuerdo en pedir un establecimiento penitenciario sin escuchar a los vecinos».