Orgullosos de pertenecer al Hospital Erill

Hace unos 3 meses, una vez más el equipo de salud interdisciplinario del hospital Erill, atravesó un caso complejo en varios aspectos. Una ñina, «C», de 14 años, con un cuadro que evidenciaba desnutrición y trastornos en su alimentación, se internaba en el servicio de pediatría. No era sencillo. La derivación a un centro especializado, no aparecía. Se realizaron interconsultas y ateneos por zoom con hospitales de alta especialización, para prepararse y capacitarse. Horas de estudio e investigación. Reuniones con la familia para explicarles, alojar su angustia y frustración. Distintos servicios, salas y unidades, de manera conjunta y comunicada, tomaron las riendas de la situación.

El objetivo era resolver o sanar una enfermedad integral. La meta, el alta o externación cuando llegara el momento oportuno.

Pediatría, salud mental, servicio social, nutrición, enfermería, dirección. Todos en un equipo maravilloso.

Con aciertos y errores; fortalezas y debilidades.

Pero por sobre todo con: vocación, compromiso, pasión, humildad, valentía y compasión. Qué más.

La historia que hoy les cuento finaliza una etapa con el festejo de los 15 años de C en el hospital.

El regalo, su externación en la fecha para continuar su tratamiento de manera ambulatoria.

A veces nos preguntamos porqué elegimos trabajar en salud. La respuesta es simple: para construir felicidad…el que da siempre recibe más.

Orgullosos de pertenecer al Hospital Erill.

Muchas gracias