Escobar: Milei obtuvo el 52,4%; Massa el 47,6%

La victoria de Javier Milei fue contundente en todo el país, incluyendo el distrito de Escobar, donde logró un sólido 52.4% frente a Sergio Massa, quien obtuvo un 47.6%.

Durante la campaña, el intendente Sujarchuk mostró un tibio apoyo a su exjefe en el Ministerio de Economía. A pesar de algunas declaraciones que formuló a favor de Massa, el distrito continuó mostrando predominantemente carteles con la imagen del jefe comunal, instalados previamente para las PASO y las elecciones generales. La campaña a favor de Massa solo se limitó a algunas pintadas. Lo positivo: fue un alivio para los contribuyentes, ya que sus tasas no se destinaron nuevamente a una costosa campaña política.

La victoria de Milei, una persona ajena al ámbito político, y quien responsabiliza a la «casta» por la mediocridad y decadencia argentina, supone un golpe significativo para aquellos arraigados en la política tradicional. Escobar es un claro ejemplo de esto, con un gobierno que no considera necesario rendir cuentas de sus gastos; con un Estado que ha aumentado desproporcionadamente la cantidad de empleados con objetivos políticos, y un alto nivel de politización en la administración pública, donde muchos de sus funcionarios priorizan los intereses políticos por encima de las necesidades de la población.

Se inicia ahora un período de austeridad que también impactará en Escobar. El próximo gobierno nacional no continuará emitiendo dinero de manera descontrolada; es necesario comenzar a controlar la inflación y Sujarchuk deberá aprender a administrar con prudencia los recursos disponibles, incluyendo la coparticipación que le corresponde por ley. El jefe comunal enfrentará el desafío de ajustar las cuentas públicas en un contexto donde el Estado ha crecido excesivamente en estos últimos años. El derroche de recursos públicos en asuntos como la contratación de personalidades de la farándula y la organización de eventos costosos, probablemente experimentará fuertes recortes. No obstante, es probable que, una vez más en Escobar, los ajustes recaigan en los contribuyentes, quienes deberán afrontar mayores incrementos en las tasas municipales.

Las afirmaciones del intendente sobre el «Estado Presente» también fueron desafiadas en esta elección. Una gran mayoría de los habitantes de Escobar reconoce que, detrás de las fachadas de los organismos de salud y educación municipales, hay carencias graves: falta de infraestructura, médicos, escasez de turnos y ausencia de equipamiento básico para brindar servicios adecuados. La noción de un «Estado Presente» se desdibuja ante una percepción generalizada de un aparato estatal deficiente, que ofrece servicios de baja calidad y se convierte en un foco intolerable de corrupción.