Construcción de la alcaidía: vecinos responden al intendente propuesta de no cobrar impuestos

Durante la apertura del período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante de Escobar, el intendente Ariel Sujarchuk hizo referencia a dos temas espinosos que provocan tensión y preocupación en la opinión pública. Uno de ellos fue su defensa de construir un complejo habitacional en ocho hectáreas de Loma Verde, cuya población se resiste a la desaparición de uno de sus principales pulmones verdes, y el segundo asunto fue la construcción  de la alcaidía, que se inaugurará próximamente en medio del barrio Cementerio.

Al referirse a la alcaidía el intendente dijo: “Está claro que haya vecinos que no la quieran al lado». El propio jefe comunal reconoció hace un tiempo que tampoco él quisiera vivir cerca de un establecimiento carcelario. Sin embargo, poco hizo para intentar reubicarlo a un sitio despoblado. Quizás con la intención de apaciguar los ánimos de los vecinos, presentó  ahora una iniciativa que buscaría favorecer a la comunidad de la zona afectada: «Por más que nadie me lo pidió, voy a enviar una ordenanza para la eximición del 100% de las tasas municipales durante los próximos cinco años a los vecinos que estén a cinco cuadras a la redonda de donde se va a instalar la alcaidía, para que sientan que, de alguna manera, estamos acompañando este esfuerzo”.

Sin embargo, su decisión no fue muy bienvenida por la población. En declaraciones a Periódico El Cazador, tres habitantes del lugar coincidieron en expresar su enojo y en afirmar que «de todos modos la mayoría de los habitantes de la zona no pagan sus impuestos porque apenas llegan a fin de mes». Reproducimos a continuación los comentarios de tres vecinas, cuyos nombres no serán mencionados por motivos de seguridad:

• «Estoy irritada, enojada, fastidiada, indignada, el uso permanente de la vulnerabilidad y de la ingenuidad de la  gente. Esto de querer sacar los impuestos a cinco cuadras a la redonda del predio nefasto que se le ocurrió al intendente, querer tapar el sol con el dedo no es nada grato para mi, porque nos  va  a arruinar de cualquier manera. Estoy convencida de que un alto porcentaje de los vecinos que viven alrededor de la pseudo alcaidía no paga sus impuestos porque muchos ni tienen para comer, deben llegar a fin de mes, pobre gente, a los manotazos. Mira que bueno que soy que no te  cobro los impuestos, te pongo la cárcel pero no te cobro los impuestos dice ahora este buen señor. Y después sale con qué mal están los denidos, y ese tipo de comentarios, yo siento que el intendente se nos está burlando continuamente, nos ningunea, estoy harta de esta clase de políticos».
• Una vergüenza, así se compra a la gente. Yo no sé porqué le sigue llamando alcaidía porque es una cárcel. Hicieron un segundo piso arriba. Es una vergüenza que el intendente nos plantee está situación, nos va a eximir de los impuestos, y después qué.  ¿Qué vamos a hacer?  Nuestras casas, nuestros terrenos, ya no van a valer lo mismo, aparte los chicos no van a poder andar por la calle, son muchas cosas que están en contra.  No es que nosotros no queremos una cárcel, porque sabemos muy bien que hace falta, pero no es el lugar, él se equivocó, él hubiese hecho una reunión con los vecinos y nos hubiera planteado la situación y nosotros lo hubiésemos escuchado. Nosotros le hubiésemos dicho, si, nos parece bien, nos parece mal, pero él jamás nos comentó nada,  hizo todo a escondidas y cuando ya estaba todo listo vino y nos tiró el palazo, y eso no se hace. Lo que pasa es que no  sabe qué hacer ahora, por eso está haciendo todo eso. Pero nosotros seguimos diciendo que no, que no es el lugar, que no estamos de acuerdo y nunca lo estaremos.  Y esperemos que Dios nos ayude y le ganemos el juicio al Estado y no la inauguren. Eso es lo que yo espero. Me da tanta bronca.  Yo me crié en Escobar, vine a los 4 años, voy a cumplir 56, en el barrio había tres o cuatro casitas, el cementerio  tenía alambres de púa, no tenía paredones, y mi papá trabajó muchos años en el cementerio hasta que lo jubilaron y después murió. Me duele un montón ver a mi barrio lo que es ahora, imaginate lo que va a ser cuando venga toda esa gente presa y las familias de visita, porque muchos de los familiares son gente decente pero muchos son igual que los presos, por eso son así, porque la gente hace lo que ve en su casa. Y ahora es como que nos quiere comprar. y nosotros no estamos a la venta, nosotros queremos soluciones.
• El intendente toma los disensos como agresiones, no puede escuchar, no puede sentir lo que los otros le están diciendo. Hacia atrás de la alcaidía hay muy pocos vecinos, para adelante sí, está todo lo que es el barrio Donatelli. ¿Qué pienso? Que esos vecinos no pueden pagar los impuestos, no los están pagando, o sea que en realidad es todo un engaño. Si creció el pago de impuestos en Escobar es porque amenazan a la gente con sacarle su casita o el terreno que tengan. Por eso la gente hace el esfuerzo de pagar. Actualmente se está pagando 7000 pesos aproximadamente de impuestos. Una persona que trabaja de cortar el pasto, que no tiene un trabajo estable o un ingreso fijo paga eso y se queda sin comer o sin pagar la luz. Es muy cruel. En el informe de impacto ambiental no se evalúa el impacto sobre el valor de las propiedades. En una de las últimas páginas lo único que dice es que no se estudiará el impacto sobre el valor de las propiedades y se recomienda en el caso de que surja esta problemática un estudio puntual de cada caso. Es decir, si algún vecino quiere vender la propiedad y le bajan el precio por tener la cárcel ahí, va a tener que hacer una acción legal individual. Pero el estudio sí evalúa como impacto positivo el empleo que va a generar la alcaidía, porque dice que se tiene que emplear para la construcción y el funcionamiento del lugar a vecinos del barrio. Y no vemos a ningún vecino del barrio trabajando ahí. O sea en el informe se evaluó como positivo el trabajo y eso no se está cumpliendo, al menos en la construcción.