Automovilista relata extraño episodio vivido en Belén de Escobar

Una experiencia verdaderamente extraña vivió una vecina mientras conducía por el centro de Belén de Escobar acompañada por su madre -una persona mayor de edad- y su hijo de tres meses. Leamos el relato: «Quiero comentar una situacion que tuve ayer 12/12 con personal policial del Comando Patrulla Escobar; aproximadamente entre las 15:30 y 16 hs, me encontraba en mi vehículo junto a mi mamá (una persona mayor de edad) y mi hijo de tres meses, circulando por la calle Lamadrid de la localidad de Belén de Escobar, cuando de repente un patrullero sin hacer uso de sirenas se coloca detrás de mi vehículo por lo que interpreto que querían pasarme, doy lugar al paso ya que no me encontraba en apuro y al pasarme detienen su marcha delante mío de forma brusca impidiendo mi paso, entonces bajo de mi vehículo y me dirijo hacia el patrullero para preguntar qué problema hubo que actuaron de esa forma y me responden soberbiamente que «estaban en un llamado». A lo que les digo que de ser así deben circular con la sirena correspondiente. Luego regreso a mi vehículo y al ver que estos dos policías no bajaban vuelvo a pedirles que corran el patrullero porque me estaban bloqueando el paso. Después de unas cuadras circulando por calle Mitre, a baja velocidad ya que iba con mi mamá y mi bebé, observo detras de mi vehículo el mismo móvil con los mismos policías y otro móvil más, uno de los cuales se me cruza bruscamente obligándome a detener mi marcha, bajando los cuatros policías de sus patrulleros por lo que con mi mamá bajamos del vehículo preguntando si había pasado algo, porque nos paraban, ya que como se trataba del mismo móvil y mismo personal con quienes minutos antes había sucedido lo que conté más arriba, ellos sabían que arriba del vehículo viajábamos 2 mujeres y un bebé, a lo cual de mi pregunta no obtengo respuesta y fue ahí cuando uno de ellos me pide la documentación del vehículo y mía argumentando que estaban haciendo un «control de rutina». Sin dar explicaciones, sin motivo alguno tuvieron un accionar extremadamente innecesario, abusando de sus funciones, ya que nosotras en ningún momento faltamos el respeto hacia ellos ni cometimos infracción alguna. En todo caso, el «control de rutina» como ellos mencionaron, lo podrían haber hecho los dos masculinos que nos cruzaron primeramente el móvil, sin la necesidad de seguirnos y solicitar otro móvil de apoyo armando semejante circo innecesariamente».
Tras la lectura de  este insólito episodio, varias personas transmitieron sus reflexiones en las redes sociales. Una de ellas relató un hecho de similares características:  «A mi papá le pasó lo mismo, le cruzaron las motos, le filmaron la camioneta sin darle explicaciones, lo hicieron bajar, y cuando les pide explicaciones no le dijieron nada y se fueron, mi viejo es un laburante de 67 años con su camioneta peugeot vieja, una mier… el momento». Otros vecinos sugirieron denunciar situaciones de esta naturaleza por considerarlas arbitrarias:  «Tenía que ir a la comisaría en ese momento»; «Lo tenés que filmar,  bien escrachado!!!!». Una vecina, en cambio, relativizó esa posibilidad: «Denunciar esa conducta, ante quién? Ante sus propios compañeros? No parece tener mucho sentido». Finalmente, un hombre justificó la acción con el siguiente argumento: «Seguro que el auto tenía la denuncia. Por eso lo seguían».