Vehículos eléctricos: lo que hay que saber
Por Ricardo Marcelo Román (Barrio El Cazador)
Hasta hace poco tiempo pensábamos que los vehículos eléctricos no iban a llegar, pero de a poco se están acercando aunque aún están lejos de ser accesibles. Hace unos días me crucé con un auto eléctrico que está circulando por las calles de El Cazador, su dueño convirtió un viejo auto y lo actualizó con un motor eléctrico y un pack de baterías. En el mundo de la electromovilidad se conoce esas conversiones como «retrofits».
Mucho más es lo que hay por conocer con respecto a los vehículos eléctricos y está bueno que vayamos conociendo sus prestaciones y sus limitaciones.
Cuando apenas comenzaron a desarrollarse los primeros automóviles se crearon vehículos con motor a combustión y vehículos con motor eléctrico. El motor a combustión se impuso por una de sus principales características, que es la autonomía que permite y la facilidad con la que se puede recargar. De a poco los autos eléctricos están mejorando en estos aspectos, tanto en autonomía como en velocidad de recarga, aunque todavía faltan puntos donde llevarlo a cabo. La ventaja que tiene un vehículo eléctrico es que puede ser recargado en el domicilio del propietario o utilizando casi cualquier enchufe. Su limitación estará dada en la velocidad en la cual se obtendrá la recarga final. Así y todo hay vehículos eléctricos que no necesitan ninguna red eléctrica a la cual conectarse, por eso me parece muy interesante poder conocer cómo se denominan los diferentes vehículos eléctricos según esta característica.
A todos los vehículos eléctricos se los conoce como EV, por sus siglas en inglés, Electric Vehicle. Veremos a continuación las siglas de los diferentes tipos:
BEV: Battery Electric Vehicle. Solo eléctrico, puede incluir carga por paneles solares.
FCEV: Fuell Cell. A celda de combustible de hidrógeno.
EREV: Extended Range. Rango extendido, hay tres tipos:
– PHEV: Plug in Hybrid. Híbrido enchufable
– HEV: Hybrid. Híbrido no enchufable
– MHEV: Mild Hybrid. Híbrido no enchufable con planta motriz de combustión y eléctrica
La planta motriz de todos estos vehículos será un motor eléctrico salvo en algunos casos donde pueden combinarse un motor a combustión y un motor eléctrico que funcionan alternadamente según las necesidades del viaje para impulsar el automóvil, como en el caso de los MHEV.
Mientras que otros también tendrán dos motores, uno eléctrico y uno a combustión, pero en este caso, el segundo, hará de grupo electrógeno, es decir servirá solo para cargar la batería, tal es el caso de los HEV.
Los FCEV o a celda de combustible, son vehículos que cargan hidrógeno y por un proceso químico este hidrógeno genera electricidad que se carga en las baterías.
En otro artículo explicaré las aplicaciones del hidrógeno en la movilidad y sus denominaciones de acuerdo a la forma que este hidrógeno se obtiene de la naturaleza.
Para terminar con esta parte de los vehículos eléctricos hay que desmitificar varios puntos.
No es verdad que un vehículo eléctrico genera en su fabricación y en las de sus baterías, más huella de carbono que un vehículo convencional.
No es verdad que los vehículos eléctricos harán colapsar la red eléctrica. La gran mayoría de los eléctricos enchufables hacen carga domiciliaria, a carga lenta, durante la noche, es decir, durante el valle del consumo y en caso de necesidad las baterías de un EV pueden proveer energía a una casa por varios días.
Una de las principales ventajas de los EV empieza por la descarbonización de las ciudades al dejar de emitir gases y partículas que afectan la salud de las personas y aumentan las concentraciones de gases de «efecto invernadero» por lo que contribuye a mitigar los efectos del cambio climático.
Sería deseable que pudieran alimentarse solo de fuentes renovables de energía, lo cual los hace más ecológicos, pero eso depende de la matriz energética del país. En el caso del país vecino Uruguay, hace unos pocos días alcanzó a generar el 94% de sus necesidades energéticas con fuentes renovables. Argentina ha alcanzado picos de 25% para abastecer el Sistema Interconectado Nacional, teniendo aún capacidad instalada para generar valores mayores.
Por supuesto, los EV que deberían prevalecer son los que son únicamente eléctricos. En algunas ciudades como París, para el año 2030, no se permitirá la circulación de vehículos de combustión y en 2035 ya no se permitirá en Europa la fabricación de estos vehículos.
El motor a combustión tiene todavía un tiempo de sobrevida, combustibles como el biodiésel se están haciendo más accesibles y, además, no existe todavía la posibilidad de reemplazar los 1400 millones de vehículos particulares con motor a combustión. Lo cual lleva a más temas que deben discutirse en la agenda del desarrollo como es que haya un paso más y los vehículos eléctricos sean compartidos, conectados y autónomos.
Temas que será interesante desarrollar en una próxima entrega.
Interesante, gracias !
Muchas gracias por tu comentario
Muy instructivo y claro el artículo. Espero las continuaciones!
Gracias Ricardo.