Municipalidad continúa con sus «mesas territoriales»; vecinos, desconfiados

La Municipalidad se encuentra activa y ocupada en la organización de  sus  «mesas territoriales» de participación abierta a la comunidad «para debatir y pulir el Plan Estratégico Territorial (PET) 2030».
Según la comuna, en estas reuniones «se busca conocer las problemáticas locales y establecer criterios de urbanismo táctico, es decir, qué necesita puntualmente cada localidad o barrio escuchando a sus vecinos y trabajando en equipo. De este modo resulta más fácil detectar y solucionar distintas problemáticas de infraestructura, seguridad, entre tantas otras posibilidades».
Las autoridades municipales definen al PET 2030 como «una propuesta impulsada por Ariel Sujarchuk que se lanzó en 2020, con el objetivo de ordenar el crecimiento del distrito con criterios sostenibles, inclusivos y equitativos». Asimismo aclaran que se trata de «un proyecto que brinda las pautas para la urbanización de la próxima década. En tal sentido, se están diseñando los nuevos códigos de edificación, ordenamiento territorial, ambiental, de espacio público y de parcelamiento con el objetivo de proteger al ambiente natural, consolidar y fortalecer el área agrícola y ordenar el crecimiento urbano».
Al cierre de esta edición, se encuentra reunida la «mesa territorial» de Ingeniero Maschwitz.
Las personas interesadas en participar en las siguientes reuniones encontrarán el cronograma correspondiente a cada localidad en www.escobar.gob.ar/plan-estrategico-territorial/.

«Ellos tienen básicamente todo decidido»

Pese al supuesto espíritu democrático y participativo de las «mesas territoriales,» la percepción de un sector de la comunidad parece ser otra. «Estas reuniones que se vienen organizando en todas las localidades del Partido de Escobar no son sinceras, porque ellos tienen básicamente todo decidido», sostiene una mujer. «Se muestran cordiales, escuchan lo que les conviene, toman nota, dicen «si» a todo, se dan vuelta y hacen lo que quieren o ya tienen planificado. Y cuando se les discute algo que les molesta suelen aparecer e interrumpir «vecinos» defensores de la voz oficial que hacen imposible continuar con el debate». Otro participante recordó la presencia de «un arquitecto que formaba parte de la representación oficial (que) terminó renunciando porque advirtió que la política se imponía a los razonables deseos y sugerencias de los vecinos».