Un banco da que hablar

«Así está el banco de la entrada de Escobar», fue la consigna de un participante de una red social que apareció junto a la fotografía de presentación de esta nota. La imagen del asiento ubicado en la parada de colectivos del acceso a Escobar (cerca del «reloj») provocó una catarata de opiniones, muchas de ellas responsabilizando a «la gente», por su escaso interés en preservar el espacio público, y a la Municipalidad por instalar elementos de escasa calidad y no repararlos en tiempo y forma.

«Están así del día uno. No duraron nada» asegura un vecino, cuya declaración es confirmada por otros: «Ese banco está en la parada del reloj de Escobar, no duró nada. En la foto no se ve, pero el respaldo está roto y caído para el otro lado. Creo que a la semana que lo pusieron ya lo rompieron, y después se quejan que no le ponen nada»; «Exacto, yo lo publiqué a las pocas semanas que los pusieron..son de lata…se hundieron en el medio porque no aguantaron el peso de nadie…y después el respaldo se rompió también», «Son berretas de material pero cuestan como si fueran de oro. Está pensado para recaudar. Perdón, para arreglarlos seguidos como la calle Colón». Otras voces afirman lo siguiente: «Si, tienen razón, no cuidan nada, la gente rompe todo, pero ese banco no aguanta a una persona pesada, acá hacen pan para hoy y hambre para mañana». «Es como dijeron, se rompieron al poco tiempo de ser instalados, y si bien es verdad que la gente no cuida, el diseño que tienen es tan malo que el solo hecho de que la gente se sentara hacía que cada vez se hundiera más.. como siempre digo, el que diseñó esas paradas no se tomó un bondi en su p… vida».