Soy mamá y docente

Docente y mamá.

Ejerzo hace más de 25 años y la profesión me sorprende. Cuando estoy con mis alumnos, me siento feliz.

El  extensísimo confinamiento del año pasado  y el que asoma este año me entristecen sobremanera.

Entiendo que el mejor lugar es el aula.

No estoy afiliada a ningún sindicato. Voy a trabajar cuando hay paro, con problemas de salud y familiares.

Cuando leo que hay padres que reclaman por el legítimo derecho de nuestro hijos a la educación y mientras tanto despotrican contra los docentes que ilustran a sus hijos. Me parece esto bastante incongruente.

Yo también pago cuotas, debo dar clases con mis hijos en casa (uno de 6 años) que requiere de su mamá. Aclaro esto porque hay personas que creen que es cómodo trabajar desde casa. Aclaro que doy todas mis clases, así que empiezo a las 8 AM y termino a las 4 PM. Sin contar los problemas constantes con la luz e Internet.

No estoy en posición de tomar decisiones, debo acatarlas.

Aproveché este espacio para aclararles estos puntos. La postura simplista de ver al docente sindicalizado, negligente y que falta a ultranza no me representa.

Además de tener clases, los chicos debieran escuchar de sus padres comentarios más respetuosos en relación a los docentes. Lo que nos pasa no es solamente la pandemia. Son años de maltrato al sistema educativo como a otros tantos ámbitos.

Ojalá podamos aprender de estos errores para construir un futuro mejor.

Margot (Escobar)