«Pude darle de cenar a mi hijo»
En un país con muchos gobernantes tránsfugas y corruptos, los actos solidarios y humanos constituyen un alivio muy necesario. Hace unos días, una vecina de Ingeniero Maschwitz pidió una pizza desde su casa, hasta que se enteró de su precio: «Era fin de mes y estaba ajustada de dinero», expresó la joven mujer. Sin embargo, el pizzero Matías Lugones, decidió ayudarla mandándole la pizza sin cobrarle. «La verdad es que me salvó porque no tenía mucho dinero y ya eran las 22:30, y todos los lugares estaban cerrados. Le estoy muy agradecida porque pude darle de cenar a mi hijo», agregó la señora.
Minutos después, Matías respondió humildemente: «Gracias a ti, Yesi, por tu agradecimiento. Fue un placer poder ayudar en esa situación, la verdad es que no sabía todo lo que estabas pasando (NdR: la mujer mencionó vagamente un problema que tuvo en una UDP después de dar a luz)». Numerosos comentarios elogiaron la acción, haciendo hincapié en la amabilidad y generosidad del joven Matías, «un excelente vendedor y una persona maravillosa».
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