Pese a todo, nació con vida

La fotografía muestra un gatito bebé nacido en un contexto peculiar. Su madre, de aproximadamente un año de edad, vive rodeada «de amor y ternura» en una vivienda de Belén de Escobar, cuenta la veterinaria Lucila, quien junto a su marido que ejerce la misma profesión, fueron llamados hace unos días desde ese lugar. La situación con la que se encontraron era complicada: una gata tenía desde hacía algunas horas  “un cachorro trabado, encajado, que no lo podía largar”. Cuenta Lucila: “Había salido de cola cuando siempre nacen de cabeza, y la cabeza había quedado trabada”. Tras algunas maniobras lograron sacar al gatito ya fallecido después de tantas horas con la cabecita adentro y el cuerpo afuera. “Hicimos entonces una cesárea para sacar al resto de la cría y encontramos éste (ver fotografía) que pensábamos que también había muerto”. Sin embargo, al tratar de revivirlo, de reanimarlo con calor y frotándolo, ¡empezó a respirar! A la consulta de los cuidados posteriores, Lucila sostiene que “no constituye en realidad mucha ciencia: hay que ver si la mamá tiene leche, caso contrario hay que darle con mamadera o algún goterito porque es muy chiquitito, y darle calor, porque no mantiene la temperatura”. Los dueños del recién nacido  acercaron de inmediato un caloventor y, felices con la nueva compañía, despidieron a los veterinarios que tras arduos esfuerzos lograron traer al mundo esta nueva y encantadora mascota.