Miguel Jobe, un escobarense de pura cepa

Miguel Jobe tiene 67 años. Nació en la Ciudad de Buenos Aires y sus padres se radicaron en Escobar cuando él tenía apenas dos años.

Aquí cursó sus estudios primarios en la Escuela Nº 14 y los secundarios en el Instituto San Vicente de Paul. Se recibió de Bachiller Nacional en 1974, se casó y es un padre feliz con dos hijas.

Puede afirmarse que es un escobarense de pura cepa.

En la década del 90, comenzó a participar en organizaciones intermedias, integrando la Comisión Pro Universidad de Luján y la Cooperadora de la Escuela Nº 14.

En 1994, cuando Luis Patti inició su campaña para intendente de Escobar, Jobe decidió colaborar en ese espacio. Integró la lista de concejales, fue electo para el período 1995-1999 y presidió el Concejo Deliberante durante el mismo período. En 1999 fue electo Diputado Nacional por el Partido de Unidad Bonaerense para el período 1999-2003, transformándose en el primer Diputado Nacional electo por el Partido de Escobar. Posteriormente, fue nuevamente electo concejal en los períodos 2003-2007 y 2013-2017.

Actualmente, es Secretario General de la Obra Social de Legisladores de la República Argentina (O.S.Le.R.A.).

Su moderación, su profundo arraigo como escobarense y su activa participación tanto en la Cámara de Diputados de la Nación como en el Concejo Deliberante local lo convierten en una voz autorizada para hablar sobre la realidad del Partido de Escobar. Por esta razón, Periódico El Cazador lo entrevistó de la siguiente manera:

¿Cuál es su opinión sobre las distintas administraciones municipales que recuerda?

Fernando Valle fue un buen administrador, pero no pudo coordinar las políticas nacionales y provinciales con las necesidades de Escobar.

Luis Patti, le dio al distrito un gran impulso en infraestructura, educación, salud y seguridad que no tenía y que aún perdura y es reconocida por los vecinos.

Silvio González, no tuvo la dinámica de su antecesor y tampoco los contactos necesarios con la política nacional y provincial que beneficiarían al distrito.

Sandro Guzmán, durante sus dos periodos tuvo los contactos necesarios con Nación y Provincia, pero no se vieron reflejados en el mejoramiento de Escobar.

Ariel Sujarchuk, arrancó con una vara baja que le dejó su antecesor lo que le permitió que se visualizara rápidamente las obras que realizó e incorporó todas las nuevas urbanizaciones que se desarrollan entre la barranca de El Cazador y el Rio Luján posibilitando una nueva territorialidad.

La clase política está sufriendo su peor crisis. La desconfianza de la sociedad hacia ella es innegable. ¿Cuáles son los motivos, a su entender, de este nuevo fenómeno?

Esta situación tiene a mi entender dos cuestiones: la primera y fundamental es que las personas que viven de su actividad y son honestas intelectual y económicamente no se involucran como debieran y la segunda es que esta cuestión deja abierta la posibilidad para quienes no tienen nada que perder y ven una salida rápida de ascenso no solo de poder sino económica. El más claro ejemplo es el actual Presidente de la Nación que resultó electo fundamentalmente porque sus competidores eran para la mayoría de los votantes, más de lo mismo y parte del problema.

¿Cómo se puede mejorar o prestigiar la imagen de la política en Escobar?

La imagen de la política en Escobar se debe mejorar con la participación activa de vecinos honestos y reconocidos por la sociedad escobarense cuyo único objetivo sea el mejoramiento de la calidad de vida para las actuales y futuras generaciones que habiten el distrito y no solamente para su provecho personal.

Como dirigente de Proyecto Escobar, ¿qué ofrece usted a la ciudadanía de Escobar?

Proyecto Escobar es una agrupación municipal, que tiene actualmente una representante en el Concejo Deliberante, la Dra. Gabriela Hernández, y es una organización abierta a todas las inquietudes y propuestas de los vecinos de todo el Partido de Escobar y a quienes convocamos a participar activamente en nuestra agrupación.

¿Qué los diferencia de los demás bloques legislativos?

La actividad legislativa desarrollada por la concejal Hernández, demuestra que no es ni una oposición complaciente ni una obstinada, prueba de ello, es que han sido innumerables los proyectos presentados, muchos no tratados o trabados por la mayoría oficialista. Como así también el mejoramiento de muchos proyectos   que proviniendo del Ejecutivo o de otros bloques tuvieron su acompañamiento. En las versiones taquigráficas de las sesiones que se encuentran en la página web del Concejo Deliberante, se pueden analizar sus expresiones vertidas.