¿La culpa es del perro?

“Las políticas públicas logran la maximización de la satisfacción social” (Lic. Jorgelina Russo)
“No se trata de buscar culpables, sino de buscar una solución que nos beneficie a todos” (Prof. José Barrientos Rastrojo)

Las organizaciones de protección de animales y muchos vecinos vienen expresando su  indignación por la escasa cifra de turnos para castraciones de perros y gatos que otorga el Centro de Zoonosis de Escobar, cuya cantidad, que siempre fue insuficiente, disminuyó dramáticamente en el último medio año debido a la pandemia, una excusa injustificada para muchos.
«Es imprescindible que retomen la actividad normal» explica Isabel, que no comprende la poca trascendencia que le asigna el Municipio a este tema y cuyas consecuencias ya se advierten en la vía pública, con un crecimiento exponencial de animales domésticos. «No nos falta nada, tenemos muy buenos profesionales en Zoonosis, sólo falta la determinación política» asegura la vecina.
Desde abril de 2020 una agrupación de vecinos de Escobar viene solicitado en forma reiterada y por distintos canales de comunicación (con  el respaldo de  firmas de cientos de vecinos de todo el partido), una reunión virtual con el intendente para explicarle en profundidad el alcance que tiene el «Programa de control ético de sobrepoblación de perros y gatos», que, aclaran, «va mucho más allá de la salud de los animales, pues hace a la salud de la población y el ambiente». Sobre las consecuencias en la salud humana, dicen: «Eso bien lo sabemos, ya que a diario vemos animales en malas condiciones acompañados de niños en igual situación».
«Imitemos a Almirante Brown» recalca Eduardo, miembro de una asociación proteccionista. Es que en ese distrito, como en muchos otros, se aplica el «Programa efectivo de control poblacional de fauna urbana», probado desde hace más de 20 años y que coloca a nuestro país como pionero en el mundo en la solución ética y eficaz de esta problemática. «Allí, en Almirante Brown, empleando una nueva estrategia para elevar la cantidad de castraciones durante la pandemia, se decidió acondicionar un segundo quirófano y así logran castrar a 100 perros y gatos por día con el debido protocolo sanitario». Y agrega Eduardo: «En esa jurisdicción operan 50 perros en un quirófano grande mientras otro veterinario castra 50 gatos en el pabellón donde funciona el Centro de Atención Primaria, que se dividió en dos para poder seguir atendiendo la clínica con otro veterinario al mismo tiempo. Y aclaro que en tiempos normales, Almirante Brown realiza 200 castraciones diarias, entre la sede y los móviles, además de la atención clínica primaria».
La sociedad probablemente seguirá conviviendo con la pandemia un largo tiempo y es responsabilidad y obligación de los gobernantes normalizar cuanto antes el servicio público de castraciones, con todos los protocolos necesarios, de modo de llegar a las 150 castraciones mínimas diarias que necesita el municipio de Escobar, con relación a la cantidad de habitantes, para controlar el problema de salud pública que trae aparejado la sobrepoblación de perros y gatos. Solo de este modo se cumplirá con la sabia letra y espíritu de la ley provincial N° 13879/08 de Control Poblacional de Perros y Gatos, y con los DNU presidenciales, que, desde el inicio de la pandemia, han declarado a la atención veterinaria -un componente de la salud pública- como actividad esencial.