Conectar para Desconectar, ¡nuestro Rincón Literario!

Bienvenidos a «Conectar para Desconectar», un Rincón Literario donde podrás viajar por nuevas sensaciones y emociones a través de notas y poesías de autores locales.

 

S.O.S Universo

No tiene perdón aquel que hace del cauce natural del arroyo un sesgo prolífero de desechos. Malditas las manos que arrojan basura y contaminan, convirtiéndolo en un río de lágrimas, de sangre, de estancada corriente maloliente donde ni el sol ni la luna pueden lavarse la cara. Malditas las manos que despojan sus miserias sobre él, haciéndolo un arroyo triste y vulnerable que ha perdido hace tiempo la transparencia. Un arroyo donde el murmullo de sus aguas pasa a ser llanto y pedido de socorro a la vez. El arroyo aún vive, pero está en lenta agonía.

Rita Frank

«Las flores de cerezo sobre tus lunares de insignia

mojado entre las líneas de nuestros labios

que sollozan espasmos

que reclaman la ternura

la ternura que nos busca

tener una medianera para mirarte

para encontrar

lo que no podemos mostrar. «

Agus Mendoza / es.ineffable

Decimotercer cumpleaños

 

A Micaela Parra.

Sus ojos caminan por las aulas,

los caminos se abren

con su mirada, flores y pétalos

caen rendidas a su morada.

Es la época, donde las flores

crecen de tallo a más no poder

y la espada ensangrentada

desean entender.

Las mariposas llegaron

cada mes rugen en su aro,

cierra los ojos, las ninfas

de inocencia se alejaron.

Ella se viste con sus alas,

vuela por las nubes, abandona

extrañas sábanas de abedules.

Las serpientes danzan rojo vals

ingresé en su pupila, las ninfas

y angeles se van.

Escarbo entre cenizas, un aire

etéreo tienen pocos, destellan

sus ojos, llaves que liberan locos.

Lucio S.C

Mil lunas

– Se fue, como se fueron los poemas-

Conté mil lunas creyendo que si llegaba a la última producía el milagro.

Conté mil lunas de a una y pinté su pelo de color naranjo.

Cuando el gris de la vida tapó los colores de una de las vidas que más quería y recordé que los dioses no curan en sábado.

Juan Bottana

 

Noche de luna

Otra hermosa noche,

nunca había visto una luna así.

Tú no estás aquí para contemplarla,

siento tu ausencia

más que en otras noches,

¿por qué será?

Prefiero una noche sin luna

y no observar a los enamorados

besándose bajo las estrellas.

Mis brazos me rodean,

buscando consuelo,

y el vacío crece dentro de mí.

Por favor, no más noches como esta,

culpo a la luna y no a ti.

que injusto para ella y para mi.

María Sánchez

Poema de las musas (poema final)

He visto a las musas

bailar entre mis penas, para darme un poema.

Son los placeres más fuertes y las mujeres más bellas del mundo.

También las vi convertirse en pequeñas sombras satisfaciendo los deseos

de seres perdidos, sufridos, ofendidos.

He visto a las musas

(las más inteligentes de la muerte) dando vida

y haciendo añicos sus argumentos

frente al protagonismo de sus amantes.

He visto a musas

sacar con sus alas brillo, a los hierros de sus jaulas

compradas por sus hombres.

Las he visto bajarse la falda a la luz de la luna

para vivir en una cueva de vanidades.

Las he visto superar el hambre, las guerras, la muerte y pandemias…

Para luego caer de rodillas frente a un beso deshonesto.

Las vi esconder su fuerza, maquillar su poder,

frenar sus éxitos,

masticar frustraciones ajenas,

y hacerse cargo de necesidades inconvenientes,

hasta desintegrarse, derretirse, desdibujarse, deshabitarse.

Estallar y recomponerse como un hueso

que recibió el impacto de una bala.

Las he visto, y las veo.

Y para ellas,

yo también he sido, (soy)

el ruido de las cosas rotas.

Pablo Barroso