¡Adiós Daniel!
Daniel Carlos Guerra era uno de esos vecinos que se hacían querer, siempre de buen humor, conversador, un hombre de bien. En 2007, el año de la nevada, se estableció en El Cazador, en la calle Zorzal, junto a su familia. Su señora afirma que lo conocían todos, que no había lugar donde no lo reconocieran. Y así era. Se lo veía charlando en algún comercio, en alguna reunión vecinal o en la vieja Delegación Municipal. Por doquier tenía amigos y conocidos.
Mañana parte a las 12 hs desde la casa de sepelio ubicada en la Av. San Martín frente a YPF.
¡Descansa en paz, amigo!
El fallecimiento de Daniel se podría a ver evitado si la ambulancia no hubiese tardado 45 minutos donde mi marido y yo le hicimos RCP,en un momento dado dio señales de vida pero se nos fue porq no teníamos las herramienta para compensarlo,una verdadera vergüenza del estado y decidia por tener la parte de salud abandonada
Mi más sentido pésame a la familia
La Biblia habla muchas veces del día en el que los muertos volverán a vivir. Por ejemplo, al describir cómo será la vida en la Tierra en el futuro, dice que Dios “limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más, ni existirá ya más lamento ni clamor ni dolor” (Revelación [Apocalipsis] 21:3, 4). ¿Se lo imagina?
Gracias a la esperanza de volver a ver a sus seres queridos, muchas personas que creen en Jehová, el Dios de la Biblia, tienen más fortaleza para sobrellevar el duelo. Por ejemplo, Ann, que perdió a su esposo después de sesenta y cinco años de matrimonio, explica: “La Biblia me asegura que nuestros seres queridos que han muerto no están sufriendo y que Dios resucitará a todos los que están en su memoria. Pienso en esto siempre que me acuerdo de mi esposo, y así puedo soportar la peor experiencia de mi vida”.
Tina, mencionada antes, dice: “Desde el día que murió Timo, he notado el apoyo de Dios. He sentido la ayuda de la poderosa mano de Jehová en los momentos de angustia. La promesa bíblica de la resurrección es muy real para mí y me da fuerzas para seguir adelante hasta el día que vuelva a ver a Timo”.
Estas palabras reflejan lo que sienten millones de personas que confían en la Biblia. Si usted piensa que lo que dice la Biblia es solo un sueño, ¿por qué no analiza las pruebas que demuestran que sus consejos son razonables y sus promesas son posibles? Se dará cuenta de que la Biblia es la mejor ayuda para quienes han perdido a un ser querido.