Notificación causa desagrado

Un pequeño cartel instalado en una tranquera de una vivienda del barrio El Cazador, motivó el envío de una notificación municipal exigiendo al propietario el retiro del mismo. El letrero que, en el ínterin, fue quitado del lugar aludía a un Atelier con servicio de restauraciones. El hecho, que trascendió a través de un grupo de whatsapp, provocó la inmediata solidaridad de varios vecinos hacia el dueño del Atelier. Hubo quienes sostuvieron que el actual contexto económico impone una mayor flexibilidad de parte de las autoridades municipales en el cumplimiento de las normativas y ordenanzas. Otros pidieron un mayor «equilibrio entre los derechos de los ciudadanos y el de los políticos» opinando que estos últimos instalan carteles en la vía pública con fines puramente propagandísticos, pintan paredes con consignas políticas y cuelgan  letreros durante las campañas proselitistas «cuando y donde se les ocurre». Por ello reclamaron mayor «prudencia» a los inspectores; hubo quien exigió que «en lugar de molestar a un vecino trabajador se ocupen de sancionar a quienes provocan ruidos molestos y al intendente por no reparar las calles».