No hay nada para festejar

Mañana, 29 de abril, se festeja el Día del Animal en conmemoración del fallecimiento de Ignacio Lucas Albarracín, un abogado que a fines del siglo XIX fue un gran pionero en el país en la lucha por los derechos de los animales.

Sin embargo, la agrupación provincial Buenos Aires Castraciones Masivas, de la que Escobar forma parte, considera que no habrá nada para festejar y que «miles de vecinos de los 135 municipios de la provincia exigen al gobernador, angustiados en medio de la pandemia, que se continúe brindando un servicio esencial de salud pública» en referencia a las castraciones. En ese marco aseguran que la ley provincial 13879/08 vino a terminar con las matanzas de perros y gatos en la provincia, porque  exige castraciones masivas y gratuitas en todos los Municipios, «única manera de equilibrar la cantidad de animales con los hogares disponibles, actuando sobre el origen del problema, que son los nacimientos». Sin embargo sostienen que en lugar de dar cumplimiento a la ley «el Estado reemplazó el anterior método de muerte en cámaras de gas por agonías dolorosas y muerte en las calles. Porque el Estado nos abandonó a todos y cuando el Estado deja de cumplir con la ley y con su responsabilidad hiere de muerte a los animales, pero también a la sociedad, que aprende con el ejemplo, y el ejemplo que da es la inacción, el abandono, la indiferencia y el incumplimiento de la ley». La entidad también considera que el Ministerio de Salud, como autoridad de aplicación de la misma, tiene la obligación de hacer que los Municipios castren masivamente. «La ausencia de este servicio o su prestación insuficiente logró que la sobrepoblación aumentara, junto con el riesgo de epidemias zoonóticas como la rabia, entre varias otras, dejando a la población humana a cargo de enfrentar sola las consecuencias epidémicas de la sobrepoblación de perros y gatos» aseguran más adelante. Y tal como lo vienen haciendo regularmente vuelven a apelar al gobernador de la Provincia para que «haga cumplir la ley y se brinde un servicio masivo, gratuito, sistemático, temprano, abarcativo y extendido de castraciones y vacunación antirrábica en todos los Municipios para, controlando la población animal, evitar las zoonosis». Por último sostienen que «mientras esta situación no se resuelva millones de animales se siguen reproduciendo con un triste destino: el abandono y el sufrimiento hasta la muerte».