Lluvias intensas y dos relatos distintos

Una vez más, la información oficial contrasta con los testimonios y experiencias de los vecinos. Incluso frente a las lluvias y sus consecuencias, parecen convivir dos realidades opuestas.

 

Durante la madrugada del domingo, el partido de Escobar recibió 48 milímetros de lluvia entre las 2:30 y las 5:30 horas, acompañados por ráfagas de viento que alcanzaron los 70 km/h. “A pesar de la intensidad del fenómeno, no se registraron inundaciones, personas evacuadas ni heridos, y el agua escurrió rápidamente”, consignó un comunicado oficial.

El parte municipal también informó la caída de algunos carteles debido a las fuertes ráfagas. Además, detalló que las localidades más afectadas fueron Belén de Escobar e Ingeniero Maschwitz, donde algunas calles se vieron “momentáneamente anegadas”, aunque —según la versión oficial— hacia las 7:30 de la mañana “la situación ya se encontraba totalmente normalizada”.

Desde las primeras horas, equipos municipales realizaron tareas de limpieza, recolección de ramas y residuos, y retiro de árboles y postes caídos, con apoyo de Defensa Civil, Bomberos Voluntarios y personal de las UGC. Todas esas acciones quedaron prolijamente registradas en fotografías que acompañaron la comunicación institucional.

Sin embargo, muchos vecinos percibieron una realidad muy distinta a la que describió el Municipio. A través de redes sociales, los comentarios, fotografías y videos sobre los efectos de la tormenta se multiplicaron rápidamente, dejando en evidencia el malestar generalizado. Algunos testimonios reflejan con crudeza esa diferencia: “A fines de julio, la Municipalidad cambió unos caños en mi calle y daba la impresión de que, por fin, se había solucionado un problema crónico. Pero posiblemente hicieron mal el arreglo y, con el paso de los camiones recolectores de residuos y los montículos de poda, todo empeoró y tras la lluvia se estancó el agua. ¿Dónde está la gente competente para resolver esto de manera definitiva? Evidentemente, hay que tomar otras medidas”, afirmó una vecina (ver fotografía en el encabezamiento de esta nota).

“Se inundó todo Garín. En pleno centro, el agua entró a los comercios y viviendas, teniendo el reservorio enfrente”, publicó un vecino. “La calle que costea el zanjón de La Chechela también está totalmente anegada. No es solo por el agua: es por el barro, los pozos y el estado deplorable. Nadie hace nada. La semana pasada la máquina que debería arreglarla estaba trabajando dentro del predio de la Fiesta de la Flor. Para eso sí hay presupuesto, y los vecinos que se jodan”, denunció otra vecina. “Terrible tormenta en Garín, y gracias a los tremendos zanjones que abrió el Municipio en Alfonsina Storni, entre 18 de Julio y Falco… ahora se inunda”, señaló otro usuario. “Garín: el reservorio de aguas pluviales no evitó la inundación de la zona. Todo bla bla bla”, comentó con ironía un vecino. “Vivo en Garín desde hace 50 años y no recuerdo que se inundara el bulevar. Garín creció, pero las obras hidráulicas no”, escribió otra persona, resumiendo el sentir de muchos.