El nudo diario de la Ruta 25

Todas las mañanas, a temprana hora,  se repite la historia. Decenas de vehículos con trabajadores se dirigen por la Ruta 25 en dirección al Paraná para ingresar en alguno de los numerosos emprendimientos urbanístico privados de la zona en cuyas guardias de ingreso suelen formarse cuellos de botella, que terminan afectando la normal circulación vehicular por la ruta. Y siempre hay quienes complican aún  más el panorama, nos referimos a aquellos conductores que,  en lugar de esperar pacientemente en la fila, se pasan al carril contrario para intentar avanzar y solo terminan  obstruyendo el paso de quienes circulan por la calzada en dirección a Escobar (ver fotografía). Consecuencia: el caos.